¿Quién no se quedó atónito ante una salida de la Luna, observada casualmente en una ciudad costera? Además de ser una hermosa postal, la salida de la Luna muestra varios principios físicos.
Para mencionar el principal fenómeno, el enrojecimiento, se produce cuando la Luna está cerca del horizonte. Esto ocurre porque cerca del horizonte la atmósfera es más densa y absorbe diversas longitudes de onda de la luz, salvo la roja que llega hasta el observador. Es un fenómeno normal y ocurre cada vez que el satélite natural de la Tierra se encuentra cerca del horizonte.
La razón de este color naranja o incluso rojo, se debe a la dispersión de la luz en la atmósfera de nuestro planeta. Las cantidades de partículas suspendidas en la atmósfera terrestre (según su composición), seria el responsable que una salida de la Luna sea mas "rojiza" que otra salida lunar.
A una distancia de 371.800 Km en en momento de la foto, la Luna se engalanaba durante la noche en Mar del Plata, Argentina.
Ilusión lunar
Es el supuesto fenómeno visual por el que la Luna, dependiendo de si su posición está cercana al cenit o del horizonte, parece de distinto tamaño. No existe razón física o matemática alguna, aun así, hoy en día sus posibles explicaciones siguen estando en debate. La respuesta mas acertada es que, frente al horizonte, la Luna es fácilmente comparable con cualquier objeto cercano. Mientras que cuando esta en el cenit (bien alta en el cielo) no hay objetos terrestres lejanos que podamos usar conscientemente o inconscientemente de referencia.
Estos dos fenómenos, son solo dos de los muchos fenómenos que inciden en una salida de la Luna.
Podríamos mencionar el fenómeno de achatamiento, rayo verde, y otros mas... que en este caso, quedará para otra ocasión. La mayoría de los fenómenos citados, son aplicables también a la salida del Sol.