El esquivo rayo verde

En 1882, Julio Verne en su novela "El rayo verde" escribió: “Un verde, un verde que ningún artista podría jamás obtener en su paleta, un verde del cual ni los variados tintes de la vegetación ni los tonos del más limpio océano podrían nunca producir un igual. Si hay un verde en el Paraíso, es ese destello” (Verne, 1882).

El rayo verde [1] es un destello colorido, observado en ocasiones muy puntuales en la salida o puesta de Sol y a veces de Luna. Es un fenómeno difícil de detectar para aquel observador distraído, debido a su fugaz duración, en torno al segundo. También se ha documentado la aparición de rayos rojos y azules. 

Debido a que es observable en condiciones muy específicas, y por tanto nada frecuente, este fenómeno ha sido clasificado en el pasado como una leyenda, como parte de aquellos relatos de marineros místicos. Hoy gracias a los registros fotográficos y oculares, sabemos que es un fenómeno totalmente posible. Pero, ¿a qué se debe? 




La dispersión de Rayleigh
Para comprender la naturaleza del “rayo verde” y sus otras variantes, es interesante comprender de forma general la dispersión de Rayleigh, la misma que causa un enrojecimiento del cielo en la puesta de sol.

La refracción de la luz al atravesar la atmósfera juega un papel elemental. La luz se mueve más lentamente en las capas más bajas de la atmósfera, cuales son más densas que las superiores. Gracias a esas características atmosféricas, los rayos de luz siguen una trayectoria ligeramente curva, en la misma dirección que la curvatura de la Tierra. En otras palabras, se descompone la luz blanca, tal como un prisma lo hace.

¿Dispersión? 
La dispersión de la luz se denomina a la separación de las ondas de distinta frecuencia al atravesar un material. Todos los medios materiales son más o menos dispersivos, según su naturaleza. La luz blanca que es la suma de todos los colores del espectro visible, es descompuesta por un prisma, o en este caso, por todo el trayecto de aire cercano al horizonte: La luz debe recorrer más atmósfera que cuando el Sol se encuentra alto en el horizonte.

Cuando el haz de luz del Sol atraviesa un prisma, las distintas radiaciones monocromáticas son tanto más desviadas por refracción cuando menor es su longitud de onda. Los rayos rojos son menos desviados que los azulados en la escala cromática. 
El rojo, naranja y amarillo son los menos desviados, el verde es más desviado al igual que el azul y el violeta. 




Julio Verne y su rayo verde
Existían en el pasado creencias sobre el rayo verde. Una de ellas afirma que la persona que lo observa tiene la capacidad de leer momentáneamente los pensamientos de las personas que se encuentran a su alrededor. 
Las leyendas populares escocesas sobre el rayo verde relacionaban a este fenómeno con la aparición de un verdadero amor. Si dos personas veían al mismo tiempo el rayo verde, se amarían durante toda su vida. Esta leyenda llegó a oídos de Julio Verne, quien llegó a Escocia a mediados de siglo XIX, e inspiró al novelista realizar una novela bajo el título del fenómeno. 





NOTAS
[1] El rayo verde también es denominado destello verde. Cabe destacar que existe también variantes en su coloración.