Los
cometas son estructuras formadas por hielo, polvo, rocas, y otros elementos que
forman un objeto más o menos esférico. Forman parte de los escombros del
Sistema Solar, y como puede imaginarse, hay millones. Realizan diferentes tipos de trayectorias elípticas en torno al Sol, según la clase y subclase de cometa.
Los cometas son cuerpos sólidos, que están compuestos por materiales que se subliman en las cercanías del Sol. A gran distancia (en torno a las 5-10 UA) desarrollan una atmósfera que envuelve al núcleo, que se la nombra coma o cabellera, que está formada por gas y polvo. A medida que el cometa se acerca al Sol, el viento solar azota la coma y se genera la cola característica, la cual está formada por polvo y el gas de la coma ionizado.
Algunos
son regulares en su órbita, otros no. Algunos tienen órbitas cortas, otros
tienen orbitas largas. Algunos pasan cerca de la Tierra (en términos
astronómicos) otros no. Todo esto hace que, en mayor o menor medida, tengamos
una heterogeneidad de características al momento de observar cometas.
De
los miles de cometas observados por los astrónomos, la mayoría son de orden
-telescópicos-, esto quiere decir que solo son observables con telescopios,
teniendo un brillo muy débil. Un puñado pueden ser vistos con binoculares
cuando están relativamente cerca. Pero de vez en cuando (algunos astrónomos han
estimado que cada década y media) aparece alguno que puede ser observado a
simple vista. Claro está que, en este momento de la historia humana, la
contaminación lumínica puede jugar en contra al momento de definir que cometa
es observable a simple vista.
Si de cometas hablamos,
debemos obligadamente hablar del Halley, denominado técnicamente 1P/Halley. El
primer cometa que se predijo su paso, un cometa que fue observado por distintas
generaciones de sociedades y que Edmund Halley predijo su periodicidad.
Luego del gran cometa West
C/1975 V1 a mediados de los 1970, la saga de cometas brillantes siguió durante
la década de 1980 y también en 1990. Aparecieron tantos hermosos cometas como
el famosísimo Halley en 1986, o el Halle Boop, incluso el famoso cometa
Yakutake C/1995 B2.
El año 2007 comenzó con un
hermoso cometa, tan brillante que fue observado y fotografiado por personas que
no eran aficionadas ni tenían equipamiento fotográfico de gran calidad. Hablamos del Gran Cometa del 2007 (McNaught
C/2006 P1). Otros cometas menos brillantes fueron Lovejoy C/2011 W3 (2011),
Panstarrs C/2012 l4 (2013), el cometa 46p/Wirtanen, y últimamente el Leonard
C/2021 A1.
Sin embargo, probablemente
tengamos un cometa bastante interesante para 2024, con las debidas precauciones
que merecen las predicciones. Advertimos que estimar el brillo de los cometas
es una tarea compleja, tan compleja y difícil que a menudo conlleva
desilusiones.
Imagen: Cometa Leonard (C/2021 A1) fue un cometa que tuvo una interesante proporción de tamaño aparente en cielos rurales durante la segunda quincena de diciembre de 2021.
A más de 16 años, todavía el último "Gran cometa" fue el McNaught (C/2006 P1)
El cometa con un clásico nombre difícil
Este cometa lleva un
nombre compuesto, debido a que fue descubierto por el Observatorio Tsuchinshan
(China) y por el programa ATLAS. Es un cometa nuevo procedente de la Nube de
Oort con su punto más cercano al Sol (perihelio) pronosticado para el 27 de septiembre
de 2024. El perihelio será a una distancia de 0.39 UA del Sol y la máxima
aproximación a la Tierra pronosticada para el 12 de octubre de 2024 a 0.57 UA.
C/2023 A3 ¿Qué significa?
C/ significa que el cometa es uno del tipo no
periódico. Estos se originan en la nube de Oort y tienen la posibilidad de
surcar el Sistema Solar solo una vez o tardar de 200 a miles de años en orbitar
el Sol.
2023 A3 revela que el cometa fue descubierto en 2023,
dentro de la primera quincena de enero, lo que es catalogado por la Unión
Astronómica Internacional como A. El numero 3 indica que fue el
tercer objeto de naturaleza cometaria detectado en ese periodo de tiempo.
Tsuchinshan-ATLAS muestra que el descubrimiento fue realizado por
telescopios del Observatorio de la Montaña Púrpura (Observatorio
Astronómico de Zijinshan) y por el sistema estadounidense ATLAS.
Después de su
descubrimiento, se realizaron observaciones en los archivos del MPC (Centro de
Planetas Menores) arrojando información acerca del cometa. Parece ser que es un
cometa de largo período con un período orbital de ¡26.000 años! También parece
tener un núcleo muy grande.
Los especialistas en
cometas estiman que puede alcanzar un máximo brillo en torno a la magnitud -2 o
incluso -3 aproximadamente. Si los datos y las predicciones no fallan,
tendremos un cometa brillante para observar a simple vista.
Por sus características orbitales
y morfológicas, podríamos decir que el C/2023 A3 (Tsuchinshan-ATLAS) va a
desplegar una hermosa cola de cometa, muy distinto a los débiles cometas que se
suelen observar, con magnitudes por encima de la mag. 5. Después de surcar
cerca del Sol a una distancia equivalente a la de Mercurio, la coma de polvo y
hielo del C/2023 A3 se calentará cuantiosamente. ¿Qué significa esto para el
observador terrestre? Significa que las partículas de hielo se van a evaporar,
escapando rápidamente al vacío del espacio, pero llevándose polvo en gran
cantidad, y esto también significa que se extenderá en una cola larga y
brillante.
Como muestran los datos y
la experiencia observacional, los cometas que pasan cerca del Sol tienen las
colas definidas y grandes, formadas poco después de ser estimulados por el
calor del Sol.
Perspectivas para los
observadores del hemisferio sur
Para los observadores
australes (en esta parte hacemos referencia exclusivamente a los habitantes del
cono sur de América) la observación del cometa será más desfavorable que en el hemisferio norte. Tendremos
una ventana propicia más acotada para la observación antes del amanecer en septiembre de
2024, y otra luego de la puesta del Sol en octubre de 2024.
Si se pregunta en este momento por los instrumentos, si se cumple el pronóstico, será observable a simple vista, y obviamente
la vista será muy bella con unos buenos binoculares 7x50. Pero hay que tener en cuenta un detalle vital: si la cabellera del cometa se extiende por muchos grados, como algunos astrónomos
afirman, la imagen completa del cometa no será observable en el campo de un
telescopio de focal mediana (Tal como ocurrió con el Gran Cometa de 2007). Por lo que recomendamos usar instrumental con muy
baja potencia y buena apertura, como pueden ser unos binoculares 7x50.
Semana del 17 de
septiembre de 2024
Se lo ubicará a la
madrugada, antes de la salida del Sol, observable a muy
baja altura (en torno a los 10°, empezando a ganar altura y brillo al avanzar
la semana. Requerirá de un este con un horizonte totalmente libre de objetos como
colinas, casas, arboles. No está de más recordar que se necesitará un cielo
además de despejado, diáfano, es decir con buena transparencia.
Hacia el fin de semana
(sábado 21 y domingo 22) el cometa seguramente habrá duplicado su brillo, y se lo ubicará un poco más alto sobre el horizonte a la misma hora, aproximadamente 12° del punto
cardinal este.
Semana del 23 de
septiembre de 2024
En esta semana será
interesante regirse por dos factores- Ubicarse en una zona alta en el terreno, sea campo o costa.
- Observar el cometa en torno a las 5:20, en donde no
tendrá mucha altura sobre el horizonte, pero no habrá luz del crepúsculo que
atenué visualmente al cometa.
Durante esta semana,
tendremos que aprender a regir la observación entre la salida del horizonte del
cometa y la presencia del crepúsculo, crepúsculo que terminará arruinando la oscuridad del cielo y el brillo del cometa al avanzar los minutos.El 28 de septiembre, el
cometa tendrá buen brillo y estará alejado del horizonte este, antes del
amanecer, a unos 13°. Desde el 29 de septiembre
de 2024, el cometa ira perdiendo altura y brillo debido a que se sumergirá en
la luz crepuscular. ¡Basta de madrugar! el
cometa en octubre de 2024
Después de la puesta del
Sol, durante la semana del 14 de octubre de 2024, el cometa surgirá entre la
luz del crepúsculo, siendo observable con mayor facilidad hacia el 17 o 18 de septiembre.
La regla sigue siendo la misma: la ventana de observación, en este caso será entre el final del
crepúsculo y la puesta del cometa en el horizonte oeste. Deberemos buscar también en
este caso, un oeste totalmente despejado y un terreno lo más alto posible.
Cada noche que pase, será más
débil y más pequeño, hasta perder brillo a finales del mes. El cometa poco a
poco, al perder brillo, será un cometa para observarse con pequeños
telescopios.
En nuestro caso, hemos
observado una variedad interesante de cometas, telescópicos, observables con binoculares
y a simple vista. El más impactante sin dudas fue el “Gran Cometa de 2007” McNaught,
observado en enero de ese año. Alcanzó una posición y brillo tales que
permitieron su observación a simple vista desde enero de dicho año, y fue
visible a plena luz del día. Debido a su proximidad al Sol, su visión solamente
fue posible durante el crepúsculo y poco después de éste.Tendremos que esperar para
ver si los pronósticos son favorables y si la composición y morfología del
cometa ayuda o no a mantener un brillo estimado de los modelos.
“Los cometas hacen lo que
quieren […] como es de esperar”, dijo un famosísimo astrónomo refiriéndose a lo
difícil que es pronosticar brillo estimado y comportamiento de estos objetos
que han disparado la imaginación de la humanidad por eones. Mientras tanto, no
queda opción a la espera del próximo cometa que pueda ser observable como el Gran
Cometa de 2007, o como un Halle Boop a finales de la década de los 1990.
NOTAS
[1] Los objetos que tienen
magnitud negativa son MUY brillantes. Una Luna llena, por ejemplo, ronda en
magnitud -12.6. Venus (el lucero) tiene magnitud -4. Sirio, la estrella más
brillante del cielo nocturno, tiene una magnitud estimada de -1.5.